En San Luis, Marcos Fernández se abocará a partir de la semana venidera con las labores pendientes en el auto que conduce en la Clase 2 de Turismo Nacional, con el objetivo de tenerlo listo para realizar pruebas en el autódromo "Rosendo Hernández".
Su ausencia en la última fecha de 2011, disputada en Junín, fue decisiva para replantear todos los trabajos a realizar en el Renault Clío de la Clase 2 de Turismo Nacional, por parte de Marcos Fernández y así aprovechar el receso junto a su equipo, durante el cual se abocaron a desarmar el auto con el fin de evaluar qué mejoras hacerle en el futuro, y probar de cara a la primera competencia del año, que se correrá durante el 17, 18 y 19 de febrero, en La Plata.
"No fuimos a Junín porque queríamos hacer una exhaustiva revisación del Clío, y a eso nos dedicamos durante estos días. Se desarmó integramente, y así conseguimos reducir en 60 kilos el peso del auto; envíamos los amortiguadores a que se les hagan un control y se reparen si están dañados, y compramos otra cajas de velocidades", explicó Fernández, quien junto a su equipo disfruta de las vacaciones.
Al retorno del descanso, durante las próximas semanas, el Clío será rearmado y una vez que se complete con dicha labor el piloto puntano tiene previsto ensayar en el autódromo "Rosendo Hernández", para chequear las modificaciones y evaluar los cambios para obtener una prestación óptima.
