Con la mente en Neuquén, lugar donde se disputará la 3ra fecha del año, lo primordial ahora es la puesta a punto del VW Gol de Lucas Mohamed, que resultó ligeramente dañado durante la última carrera.
El choque que el tucumano protagonizó con Hanna Abdallah durante la final dejó como saldo una serie de desperfectos en la zona delantera derecha de la máquina aunque no es nada grave como para preocuparse demasiado.
“El auto está bien de funcionamiento pero después del golpe pueden haber muchas secuelas que hay que revisar muy detalladamente. Eso es lo que estamos haciendo ahora. Hay algunos daños en la parte del homocinético debidos al impacto, pero por suerte me permitieron terminar la carrera. También hay que cambiar ciertas piezas como el rodamiento, la llanta que está deformada y algunas rótulas a las cuales tenemos que analizar su estado para ver si tienen que ser reemplazadas o no”, contó el yerbabuenense.
Claro está que el coche no es lo único que debe acondicionarse para cada fecha. La preparación del piloto también es esencial y por ese motivo Lucas no se olvida de atender su propia salud y bienestar. “Obviamente que sigo con el ánimo bien arriba después de todo lo que viví en San Luis. Sin embargo estoy un poco preocupado ahora por mi salud porque he tenido muchos problemas pulmonares con algunas infecciones. Por eso es que vengo haciéndome una serie de exámenes desde la semana pasada y que van a continuar durante ésta también", agregó.
La preocupación de Mohamed lo ha llevado a tomarse los recaudos necesarios para estar en condiciones físicas optimas cuanto antes sea posible. "Lo que quiero es sentirme bien y no estar con las defensas bajas durante la previa de cada carrera porque es en ese momento cuando me complico siempre. Son muy pocas las horas de sueño que tengo en ese período y por eso mi salud se ve muy afectada”, comentó Mohamed.
FUENTE: Prensa