Tras el choque del cual fue victima Marcos Rodríguez en la competencia pasada, la escuadra Schiavon Sport se ve obligada a presentar el fin de semana en Oberá, donde se disputará el Gran Premio Día de la Madre, solo un Chevrolet Corsa tripulado por Daniel Cena.
Los daños sufridos por el Chevrolet Corsa atendido por Oscar Schiavon en su taller de Elortondo, fueron de tal magnitud que el tiempo entre la competencia de Alta Gracia y la de Oberá no fue suficiente para repararlo, como así también jugó en contra la demora en la entrega de algunos elementos a reemplazar. Vale recordar la ocasión en la cual el piloto de Río Cuarto fue víctima del choque: cuando Marcos Rodríguez se aprestaba a recibir la bandera a cuadros, el vehículo de Pablo Merayo lo embistió desde atrás, haciendo que a velocidad plena el Corsa chocara contra el paredón de boxes.
De todas formas, en la competencia del fin de semana en Oberá, la escuadra estará representada, ya que Daniel Cena volverá a ser parte del show que habitualmente brinda la Clase 2 del TN. Para repetir el protagonismo, el equipo trabajó en el Corsa del piloto de Camilo Aldao, configurando una puesta a punto inicial para un trazado que le es desconocido. Vale recordar que el TN visitó por última vez el autódromo misionero en la temporada 2002, utilizando en aquel entonces el circuito chico, único existente en ese entonces, por lo que el equipo tampoco conoce en profundidad la traza actual.
"Es un desafío mayor el de viajar a un autódromo que no se conoce, hay que ir preparados y mentalizados para trabajar al doble del ritmo habitual y con parámetros que se obtienen en el momento. Según lo hablado con pilotos que ya corrieron ahí, el desgaste de los vehículos será mayor, por que se ponen muchos cambios por vuelta y las permanentes aceleraciones y desaceleraciones en un terreno sinuoso son también permanentes, creo que varios elementos y los motores también sufrirán mucho. Tenemos confianza en que Daniel (Cena) se adaptará rápidamente, lamentablemente vamos con un solo piloto y eso también es una desventaja para ir poniendo a punto los autos, ya que con dos referencias se va ganando tiempo mientras un auto esta en pista y el otro en boxes. Lamentablemente para nosotros, el Corsa de Marcos Rodríguez no se pudo terminar ya que los daños fueron muy importantes en la parte delantera y en la trasera. La cola del Chevrolet hubo que cambiarla y también parte de la jaula. Adelante se cambiaron los portamazas y parte de la estructura. El auto va a quedar nuevo pero eso demanda horas de trabajo y elementos que hay que recibir en tiempo y forma de parte de los proveedores. Para la próxima iremos con dos autos y eso es lo más importante, sobre todo que Marcos en Río IV es local, explicó Schiavon en diálogo con www.apat.org.ar.