No había márgen de error para Gastón Iansa. En el #TNenConcordia, y con apenas cinco carreras previas en Clase 3, ganó por primera vez en la divisional, siendo nuevamente el mejor debutante de la temporada
Medio campeonato de Turismo Nacional ha quedado atrás, y en ese lapso pudo Gastón Iansa ganar por primera vez en la Clase 3 a los mandos del Toyota Corolla del equipo Tito Bessone Toyota Racing. Anterior a ello, una serie de insólitas situaciones dejaban al joven piloto residente en San Vicente (Buenos Aires), fuera de resultados positivos, varios de ellos, en zona de podio.
Posiblemente, en Concordia (Entre Ríos), siempre aparezca la mejor versión de Gastón Iansa. Formado en el equipo DG Motorsport, aún se recuerda el contundente avance en la última edición del #TNenConcordia, cuando el Ford Fiesta Kinetic llegaba al quinto lugar tras haber partido visiblemente retrasado. En aquella ocasión, un inconveniente en el motor dejó sin posibilidades a quien hoy olvida la racha adversa para confirmarse como nuevo ganador en la Clase 3, siendo el mejor debutante de la temporada.
“El equipo trabajó mucho para esta carrera; todos queríamos revertir los malos resultados que nos acompañaron las fechas anteriores. Así fue que la presión pasé a tenerla yo, porque el auto funcionó perfecto todo el fin de semana. La puesta a punto que elegimos para la carrera nos permitió ser veloces después de la primera mitad de la carrera, pero en la primera parte tuve que administrar mucho el auto, de hecho, tanto Leonel Pernia como Antonino García tenían mejor ritmo que yo, pero cuando pude imponer mi condición pude marcar la diferencia que necesitaba”, analizó quien hoy ocupa la 12º posición anual, con 78 puntos.
La largada fue clave. Subió al primer lugar que jamás dejó. Desde allí, todo fue estrategia dentro y fuera del auto, y una tensa calma en el equipo. Fuera de todas las posibilidades estaba permitirse otro traspié. Felizmente, la historia tuvo otro final. “Tuve la situación bajo control siempre, sabiendo aún que los autos de los principales protagonistas del campeonato estaban cargados con lastre; de todos los rivales quien tenía un gran auto era Mariano Werner, pero al largar desde atrás el primer rival fue Leonel Pernia. Hubiese estado bueno para la carrera y el espectáculo que Mariano Werner largue en las primeras posiciones, seguramente hubiesen surgido muy buenas maniobras de superación entre los dos”, reconoció.
Con la bandera a cuadros, todo fue emoción. “Fueron muchas las sensaciones que surgieron. Detrás de mi participación en el automovilismo hay un grupo enorme de personas que se convirtieron en amigos más que en sponsors y son ellos, junto a mi familia, quienes hacen todo para que yo corra en el Turismo Nacional. Les debía una victoria en Clase 3, y felizmente llegó rápido”.
